Desde siempre me han llamado la atención los bolsos y monederos que tienen cierre metálico, en concreto los que tienen boquillas metálicas… Este simple mecanismo que asegura el cierre realza y aporta glamour a la prenda. Por supuesto hay otros muchos factores externos a considerar como las telas, la forma… pero el mecanismo en sí puede llegar a ser una obra de arte en sí mismo: múltiples formas, repujados, labrados, de diversos colores: plateados, dorados, cobrizos…, con pasahilos o lisos para pegar y prensar….
Lo mío son bolsos grandes en los que llevar de todo, pero el estilo, elegancia y medida en general mini de los que se realizan con boquillas metálicas me encanta.
Así que por fin me he decidido a emplear una boquilla para realizar un monedero, (otro proyecto menos de la lista de proyectos 😉 ). He utilizado una boquilla sencilla, dorada, semicircular y con pasahilos. Para las telas tanto exterior como interior he empleado unas telas de la colección Gorjuss que aún no había utilizado para realizar ningún proyecto. Ya conocéis mis gustos y sabéis que no es la primera ni la última tela Gorjuss que cosa… si queréis repasar qué otras utilidades les he dado podéis ver las camisetas y bolsa que con ellas he cosido ;).
Pero volviendo al proyecto de este artículo… ¿qué os parece?
Espero que guarde con mucho amor, como los corazones que lleva, los Euros que dulcemente gane su dueña que hace ya un mes que disfruta de su mayoría de edad y su ilusión por la repostería 😉 ¡Felicidades!
¡Os deseo una feliz semana!