Aquí el 23 de Abril es un día muy especial. Un día en el que se celebra Sant Jordi, el patrón de Cataluña, un día en el que la tradición manda regalar rosas a las damas y libros a los caballeros, un día de enamorados, un día de detalles, de pasear por la Rambla o la Plaça de turno con la pareja, el amigo, la familia… en busca del esperado libro o la delicada rosa…
Curiosa manera de celebrar el día del patrón…porque “escolta noi- avui es treballa” (oye, que hoy se trabaja)… Sí ya sé que suena raro, el día del patrón y trabajando…pero no penséis que esto es una medida de ahora contra la crisis, no… esto ha sido así siempre, para que no haya ninguna duda sobre lo trabajadores que somos por estas tierras….Así que después de la dura jornada de trabajo, se saca tiempo y ganas para ir con la pareja a dar una “vueltecita” por los paseos de las ciudades- llenas de vidilla- es decir, abarrotadas de paisanos que… curiosamente están haciendo lo mismo que tú…o sea, que al final si puedes dar una vuelta estás de suerte, porque moverse y elegir un libro o una rosa -según la hora- puede ser un verdadero quebradero de cabeza y con el carrito de la criatura una carrera de obstáculos….
Ay, ¡sí! es un día romántico… sobre todo porque a las “dones” (mujeres) nos regalan una rosa…¡qué detalle!… y a ellos les regalamos un libro…¿para que se cultiven intelectualmente?… por suerte esto está cambiando y hay muchos hombres que piensan que también nos hace ilusión que nos regalen un libro… además de la rosa…;) y no hay nada de extraño en obsequiarles a ellos con una rosa…
Pero no me hagáis caso… que hoy estoy un poco rebelde y gruñona… porque yo reivindicaría que cada día fuera un regalar de rosas y un regalar de libros, de preciosas dedicatorias y pequeños detalles , que la pareja hay que cuidarla día a día y minuto a minuto… y un día como hoy… pues otro día más para disfrutar de los mimos y cuidados que nos prestan y prestamos; un día de fiesta, sí, pero para celebrar que desde el año pasado, cada día que hemos vivido ha sido un Sant Jordi, en el que con gran probabilidad hayamos discutido por el color de la rosa o el título del libro, o vete a saber porqué…pero que al final antes de ir a dormir de cada uno de esos 365 días, un tierno beso ha curado las rencillas, y es tan dulce y está tan lleno de amor que sabe a gloria, a felicidad, a la más bella rosa o al más cautivador de los libros…
Yo hoy celebro que es Sant Jordi, celebro que cada día de este último año ha sido un Sant Jordi, y brindo por los días de Sant Jordi que me/nos quedan por vivir.
Y para celebrarlo he tejido rosas, rosas para acompañar la lectura de ese libro que es nuestra vida.
Feliç Diada de Sant Jordi!
