Después de unos días de vacaciones, disfrutando del cambio de aires (bien frescos por cierto), la buena compañía, la cocina de la «abuela»…, llega la vuelta a la «rutina». Una rutina de neo-mamá que como «noparamaidefercoses.com» además de tener un montón de proyectos que bullen en su ajetreada cabecita tiene un montón de proyectos a medio acabar…
No sé si es parte del bullicio mental o es deformación personal, pero creo que la mayoría de las «costuritas» tenemos un defectillo… no sabemos empezar y acabar un proyecto antes de comenzar otro nuevo… así es que nos encontramos con un montón de labores medio empezadas… o medio acabadas, según se mire, que pueden pasar meses -incluso años- en la bolsa de la labor o en el armario correspondiente esperando tristes -que no solas- a que algún día nos fijemos de nuevo en ellas y reemprendamos su quehacer. Algunas sólo requieren unas últimas puntadas, otras un material que no teníamos…otras hay que darles unas cuántas vueltas más en la cabeza para seguir con ellas… en fin que este artículo va dedicado a todas aquellas que he ido acabando estas semanas y las que quedan por hacer…
Los calcetines Mazinger del Sebastià, a su memoria,
la toalla del cambiador de la Dàlia, un arreglo a un vestidito para que entre la cabecita…
más cuadraditos para otro chal «granny»…
y algunas puntadas de la mantita…